Comparte la noticia

Cientos de personas se movilizaron por el centro de Santa Clara del Mar para conmemorar el Día internacional de la mujer trabajadora.

La marcha convocada para el viernes 8 de marzo, contó con la participación de cientos de personas que concentraron en la rotonda del viejo Contrabandista y marcharon por el centro de Santa Clara del Mar bajo la consigna: “Todes unides marchamos. Ni un paso atrás, ni un derecho menos”.
El cierre del acto se realizó en el Anfiteatro municipal del parque El diego, y contó con un breve espetáculo musical. Entre el público, se encontraba el intendente Walter Wischnivetzky y el presidente del HCD Carlos Minnucci, entre otros.
Durante el cierre, se leyó un documento realizado en conjunto por los participantes de la Mesa Local Intersectorial contra las Violencias de Género de Mar Chiquita: (ADUM, Secretaria de Mujeres Género y Diversidad de la Municipalidad de Mar Chiquita, Educación superior DGCYE, Panambí, Panambí Juventudes, Representación distrital de ESI, Juventud Municipalidad de Mar Chiquita).

El Documento completo:

Hoy, paramos en memoria de las 129 trabajadoras que murieron incendiadas en una fábrica en Nueva York en 1908 y recuperando el legado de la lucha histórica de Clara Zetkin, cuando en 1910, proclamó el Día Internacional de la Mujer Trabajadora; como así también de las primeras sufragistas y obreras, que, a principios del siglo XX, luchaban por la conquista de nuestros derechos civiles, políticos, laborales, sociales y económicos y por el fin de la opresión del patriarcado. También, como cada 8 de marzo desde el 2017, marchamos en el marco del Paro Internacional de Mujeres.

Esta iniciativa mundial tiene sus antecedentes en el gran paro de Mujeres del 24 de octubre de 1975 en Islandia y tiene como objetivo establecer un día global de reclamo y reivindicación de los derechos de las mujeres, visibilizar la violencia machista que nos atraviesa en los distintos ámbitos (laborales, sociales y personales); como así también dimensionar la importancia de nuestro trabajo y aportes a la economía mundial, especialmente en las tareas de cuidado.
En nuestro país, venimos trabajando en este sentido desde el año 2000, cuando en el XV Encuentro Nacional de Mujeres de Paraná, 10.000 compañeras lanzamos la propuesta de la Huelga Mundial de Mujeres y el 8 de marzo de 2001 se creó la coordinación para el armado de dicha protesta, encabezada por el Sindicato de Amas de Casa de Santa Fé.

El lema propuesto por la ONU para el Paro de este año es: “Invertir en los derechos de las mujeres: acelerar el progreso y la igualdad”. En esta línea y, en el contexto del gobierno ajustador, hambreador y autoritario que hoy gobierna la Argentina, desde Mar Chiquita nos proponemos como consigna para este Día Internacional de las Mujeres y Diversidades Trabajadoras: “Todes unides marchamos. Ni un paso atrás, ni un derecho menos”; ya que entendemos que es preciso construir la unidad y una gran marcha colectiva de lucha y resistencia para dar pelea a estas políticas de ajuste y antiderechos.
Decimos “Ni un derecho menos, ni un paso atrás” de los derechos conquistados por los años de luchas, de militancia que tiene como resultado la transmisión de una conciencia colectiva por generaciones. Los derechos conquistados son el resultado de mujeres que se han animado a ser y hacer todo lo que tenían prohibido, de quienes estudiaban en secreto, de quienes escribían sin firmar, de quienes se juntaban a hablar, de quienes tomaron las calles, de quienes caminaron en una plaza buscando respuestas, de quienes cubrieron las calles del Congreso con un mar de telas verdes, de las que hoy se siguen formando, organizando en conjunto y de las que hoy están acá.

Por eso creemos que es importante conocer nuestra historia de lucha, recordando cada uno de los derechos adquiridos e hitos relevantes en nuestro país. Sucesos y derechos que hoy se encuentran en riesgo…
Decimos Ni un paso atrás con nuestros derechos civiles, conquistados en 1926, que establecieron que la mujer mayor de edad, soltera, divorciada o viuda, tiene capacidad para ejercer todos sus derechos y funciones civiles, en los mismos términos que los hombres.
También decimos ni un paso atrás, con la ley del voto femenino sancionada en 1946 y la ley de filiación y patria potestad que reconoce los derechos de las mujeres respecto de sus hijes; como así también la ley contra toda discriminación contra la mujer, vigentes desde 1985.
Ni un paso atrás, defendiendo la ley de divorcio de 1987 o la creación también ese año de la primera Subsecretaría de la Mujer.
Defenderemos la penalización de los actos discriminatorios por “motivos de sexo”, sancionada en 1988. El mismo año que se crea CODEAB: la Comisión por el derecho al aborto.
Decimos bien fuerte “Ni un paso atrás” con la ley de cupo femenino que nos garantiza representación en nuestras organizaciones y estructura políticas desde 1991.
Celebramos la creación del Consejo de la Mujer (futuro ministerio) en 1992 y la sanción de la primera ley de protección contra la violencia familiar en 1994
No retrocedemos a nuestro derecho a la salud sexual y procreación responsable, amparado en el programa generado en el 2002 o la ley de cupo femenino sindical, también de ese mismo año.
También recordamos que en el 2003, nace el ELA (Equipo Latinoamericano de Justicia y Género) y se realiza la primer marcha en Rosario con pañuelos verdes por el derecho al aborto.
Vamos a defender nuestro derecho a parto respetado, sancionado en el 2004 y vamos a luchar para que siempre siga vigente la ampliación del derecho a la jubilación de las amas de casa, sancionada en el 2005
Decimos bien fuerte, “Ni un paso atrás” con la Ley Nacional de Educación Sexual Integral del 2006 y “Ni un paso atrás” con la Ley de Protección Integral de Derechos para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales y la Asignación Universal por Hijo del 2009.
No dejaremos que nos quiten nuestra ley de matrimonio igualitario sancionada en el 2010, ni la ley de identidad de género del 2012.
Siempre recordaremos que en el 2015 fue la primera movilización de Ni una Menos, esa gran marcha que se visibilizó como la marea feminista y la conquista de la ley provincial de ESI.
Decimos “Ni un paso atrás”, con la ley de paridad de género en el ámbito político que busca garantizar la igualdad entre varones y mujeres en el acceso a puestos de representación política; estableciendo que cuando hubiera que reemplazar un legislador, la persona que lo reemplace debe tener el mismo género que la reemplazada, sancionada en el 2017.
Defenderemos la ley Micaela que establece la capacitación Obligatoria en Género para les trabajadores estatales, sancionada en el 2017 y la ley Brisa que otorga una reparación económica para les hijes de víctimas de femicidios equivalente a una jubilación mínima del 2018
Porque queremos seguir decidiendo sobre nuestros cuerpos, decimos “Ni un paso atrás” con la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo conquistada, luego de tanta lucha, en el 2020; como tampoco la Ley que de creación al Plan de ANSES “de los 1000 días”, un conjunto de políticas públicas destinadas a fortalecer los derechos de las personas gestantes durante el embarazo, y que acompañan el crecimiento de sus hijas e hijos hasta los primeros 3 años de vida, ni con el Cupo Laboral y Promoción del Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgénero “Diana Sacayán – Lohana Berkins”, de 2021.
Por todas ellas, por todas las que no están, por nosotras y por todas las que vendrán, es tan importante defender lo obtenido, tenerlo presente en cada una de nuestras acciones, palabras e interacciones; siendo conscientes de que la lucha es colectiva y que nuestro presente lo construimos todos los días.
Como decíamos anteriormente, hoy 8 de marzo nosotras conmemoramos y celebramos el día de la mujer trabajadora y recorremos nuestra historia junto a las ancestras que se hermanaron y nos legaron la lucha. Nos enseñó Simone de Beauvoir a “Nunca olvidar que bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados. Estos derechos nunca se dan por adquiridos, debemos permanecer vigilantes toda nuestra vida”.

Las mujeres aun en épocas de bienestar sufrimos la doble discriminación en tanto sujetas trabajadoras, en tanto mujeres, por eso en esta era de crueldad que inauguró el gobierno de Milei las mujeres volvemos a las calles y las plazas, porque vienen por nosotras y nos van a encontrar unidas y organizadas.
Ajuste, deflación, represión, eliminación, despidos, aumentos y más aumentos, casta… Nuestro mundo se transformó en sufrimiento, incertidumbre, desesperación y miedo porque así lo decretó el gobierno nacional.
Todo el aparato político dispuesto al servicio del terrorismo de estado. Sí, el terrorismo de estado. Lo vimos en las manifestaciones populares de estas últimas semanas gaseando, golpeando, baleando y arrestando sin causa a manifestantes. Terrorismo de estado porque nos amenaza todos los días con motosierras.
Porque elevó los índices de pobreza, quitó medicamentos a enfermos oncológicos, redujo el salario de docentes, elevó a cifras imposibles de pagar el transporte público, porque los alimentos desde que asumió son un privilegio para pocos, porque cerró universidades y otras no llegan a cubrir los insumos básicos, porque cerro de facto la agencia nacional de noticias Télam para que no conozcamos los pésimos números de su gobierno, porque amenaza con cerrar el Conicet, porque ataca la cultura nacional cuando dispara contra el Incaa, porque no entrega mercadería a los 50 mil comedores que atienden a miles de personas en todo el país, porque los y las jubiladas se están convirtiendo en indigentes teniendo que elegir qué medicamentos comprar deteriorando su salud aún más; porque echa a trabajadoras y trabajadores del estado no por achique, sino por el impúdico placer de destruir el estado argentino.
Y en medio de esta crisis social, económica y política, como fue históricamente, las mujeres, niñeces y diversidades volvemos a ser el sector más perjudicado. Prohíben el uso del lenguaje inclusivo porque rechazan y repudian nuestra presencia en los ámbitos de la vida pública; cierran las líneas de ayuda contra la violencia por razones de género porque niegan los femicidios que dan cuenta de una mujer asesinada cada 26 horas, la violencia por razones de género sigue siendo el delito más denunciado, una cautelar por día se escribe en el Juzgado de Paz para proteger nuestras vidas; arremeten contra la educación sexual integral mientras el presidente promueve en sus tweet la pedofilia; cierran el INADI para que Milei no reciba denuncias de discriminación al utilizar el término mogólico como un insulto; agrede a jóvenes cantantes mujeres haciéndole creer a la población que son responsables de la pobreza de niñes, para distraernos y proteger a los poderes económicos concentrados que hambrean al pueblo; elimina el programa ACOMPAÑAR que protegía económicamente a mujeres víctimas de la violencia por razones de género, con esta ayuda muchas pudieron salvar sus vidas y las de sus hijes; responsabiliza a las mujeres de la crianza, porque para este señor las amas de casa tienen la tarea de educar a las generaciones desconociendo que hace décadas emprendimos una lucha fundamental para las niñeces y nosotras en relación a las tareas compartidas en el hogar.
El gobierno nacional y su presidente han usurpado la palabra más importante que tenemos les humanes: LIBERTAD. Nosotras este 8 de marzo nos volvemos a apropiar de las ideas transformadoras que anteceden la palabra, reclamamos: libertad es decidir sobre nuestras cuerpas, la interrupción voluntaria del embarazo “ADENTRO”; libertad es que las infancias que sufrieron abuso puedan contar y denunciar, la ESI “ADENTRO”; libertad es que los gobiernos respeten, promuevan y apliquen la perspectiva de género, Ley Micaela “ADENTRO”; libertad es que las mujeres con dedicación exclusiva al trabajo hogareño sean retribuidas, jubilación de ama de casa “ADENTRO”; libertad es la información sin censura y la pluralidad de voces, Télam “ADENTRO”; libertad es sentir que en el momento de mayor peligro hay alguien del otro lado esperándonos, línea 144 de ayuda a la víctima “ADENTRO”. Y ante tanta crueldad, desprecio por la vida y odio contra el pueblo no hay tiempo para lamentarse. Las leyes son nuestros derechos, los avances en relación a oportunidad e igualdad no son negociables y no estamos dispuestas a permitir que nos robe estas conquistas que nos llevaron siglos. Al miedo y al silencio no volvemos nunca más.
En repudio de esta realidad despiadada y empobrecedora y en contra del avasallamiento de los derechos conquistados.. es que seguimos aqui. Hoy con más fuerza que nunca… en movimiento, motorizando las voluntades, las intenciones y los cuerpos para sostener un mundo más justo e igualitario; ese mundo con el que soñaron quienes nos antecedieron, por aquel que perdieron sus vidas tantas mujeres, olvidadas algunas y sin nombre, otras…
Un mundo más justo que defendemos y defenderemos…el cuál ponderamos en cada una de nuestros hogares, espacios, escuelas, y en cada una de las Instituciones del Partido… Un mundo que proclamamos en y con toda la comunidad… Un mundo por el cual podemos mirarnos a los ojos orgullosas y empoderadas… Por el cual entendemos y podemos ratificar que no estoy sóla y aunque eso quieren hacernos creer, no lo estamos y no lo estaremos.. Ante cada injusticia, nuestras voces sonarán más fuerte.. porque ya no nos callamos.
Porque somos, sin dudas, un colectivo que el gobierno nacional pretende desdibujar, una marea que quisieron y quieren calmar.
Por favor, miremos a nuestro alrededor unos segundos… aquí estamos y aquí seguimos.. hasta aquí nos movilizamos y seguiremos moviendo el mundo… como cada día, cada mañana, cada tarde y cada noche…
Este 8M, estamos dispuestas a inaugurar otros posibles, a entramarnos para seguir habilitando la posibilidad de emanciparnos en todos los ámbitos de la vida.
Resignificar la educación, repensando las instituciones y organizaciones, revitalizando derechos que restituyan la dignidad. Derechos que seguiremos proclamando, aun en el desconcierto, en las deshabitadas desilusiones que estos tiempos nos traen.
Reconocemos que estos son escenarios múltiples y variados, pero también reconocemos que son tiempos de solidaridad intergeneracional, de preguntas acerca de los sentidos y las construcciones históricas hechas de luchas, de unidad y de amor. También reconocemos que en distintas localidades de nuestra Patria hay victorias y decisiones políticas que nos acercan, que ayudan en la reparación y en el avance de los derechos. Ese es el caso del Partido de Mar Chiquita, que frente a las decisiones del poder ejecutivo nacional de avasallarnos, marca una diferencia: en enero del 2024, por decisión del Intendente Municipal, se jerarquizo la Dirección y se creó, dentro del organigrama municipal, la Secretaria de Mujeres, Género y Diversidad, que trabaja todos los días para que nuestras mujeres y diversidades puedan vivir una vida digna. A su vez, sigue funcionando y se reúnen mensualmente los, las y les integrantes de la Mesa Local Intersectorial de Género. Sabemos que en Mar Chiquita se encuentra a disposición de las mujeres y diversidades el personal de la Oficina de Atención a la Víctima en Santa Clara de Mar, la Comisaría de la Mujer y la Familia en Coronel Vidal, además de un sinnúmero de mujeres y diversidades que están dispuestas y organizadas para escucharte y para acompañarte..
Las mujeres excluidas de las escenas, sujetas en los márgenes o en las fronteras, proclamamos nuestro derecho irrenunciable a empujar esos extremos y dejar esa intemperie para seguir enunciando y narrando nuestro derecho frente a minorías que son las que se sienten incluidas.
La Educación en cada hogar, cada familia, cada escuela, colegio o instituto deberá problematizar, detenerse en lo que repite y naturaliza, en los lugares asignados y etiquetados, en las verdades absolutas y la simplificación del conocimiento escindido y excluyente.
Deberá preguntarse los modos de construir conocimiento sobre los derechos de la mujer, como sostenerlos y ejercerlos, para vislumbrar una sociedad que merezca la pena vivir.
Sabemos que aún falta, sí.. y aunque los intereses aunados aún no cumplan todas nuestras expectativas, QUE SON JUSTAS y que son nuestras.. Aquí estamos y no será la primera vez que nos encuentren en la calle, defendiendo lo que es nuestro.. lo que es mío, lo que es tuyo.. lo que es de todas!
Por eso, hoy más que nunca… En el Día Internacional de las Mujeres y Diversidades Trabajadoras, decimos: “Todes unides marchamos. Ni un paso atrás, ni un derecho menos”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *